Cine Teatro 25 de Mayo cumple 95 años
El Centro Cultural 25 de mayo viene festejando su 95º aniversario con una programación especial con cine, encuentro corales, teatro y música.
Este sábado 25 de mayo a las 19 hs. será un día muy especial para el Centro Cultural por ello y para todos los vecinos que lucharon durante años para lograr la reapertura del Petit Colon de Villa Urquiza se presentará la Banda Sinfónica de la Ciudad de Buenos Aires, con un repertorio especial patrio, de la mano del maestro Carlos David Jaimes. Entrada gratuita con reserva previa online.
Además el lunes 27 a las 20 hs. se proyectará la película Argentina “Cadáver exquisito”, de Lucía Vasallo. Luego de la proyección se contará con la presencia del director y elenco para dialogar con el público. Todas las funciones son gratuitas, con reserva previa en EntradasBA https://entradasba.buenosaires.gob.ar/
También se reestrenó “Medida por medida (la culpa es tuya)”, una adaptación contemporánea de la clásica obra de Shakespeare, que cuenta con la dirección de Gabriel Chamé Buendía. Esta nueva producción promete llevar al público por un viaje emocionante a través de la moralidad y el poder en el escenario shakesperiano. Habrá funciones los días jueves 16 y 30 de mayo, viernes 17, 24 y 31 de mayo, sábados 11 y 18 de mayo y 1° de junio, y domingos 12, 19, 26 de mayo y 2 de junio a las 20. Las localidades se pueden obtener a través de la web www.cc25.org.
Historia
La piedra fundamental de la construcción se colocó el 25 de mayo de 1925, bajo el padrinazgo del Señor Pedro Del Ponti y de la Señora Juana Touriñán de Sívori y del apoyo del señor Luis Andrés Sívori, Presidente de la constructora. La obra fue encargada al arquitecto Máximo Gasparutti, y se inauguró el 23 de mayo de 1929, bajo la segunda presidencia de Hipólito Yrigoyen, con una ceremonia sencilla y solemne, con la bendición del cura párroco Manuel Ruano.
Un día después, el 24 de mayo, hubo una función a cargo de la “famosa troupe Imperial procedente de los teatros europeos y del Teatro Colón de Buenos Aires, bajo la dirección del reputado artista Manuel Arroyo”, quien puso en escena una obra que reproducía los hechos históricos del 25 de mayo de 1810 y del año 1840. Dado que también funcionó como cine, se anunció “el extraordinario estreno del monumental film de Monna Maris y Liane Haid, Marquis d’Eon” y la presentación de tres orquestas: Clásica, Jazz Band, y Típica Criolla.
Por aquel entonces, el Cine Teatro 25 de Mayo fue tomado en arrendamiento por la empresa Corbicier, Wessels y Cía., quienes pretendían realizar un desarrollo artístico y ofrecer al público del barrio espectáculos teatrales y cinematográficos. Importantes artistas de Argentina pasaron por los escenarios “del 25 de Mayo”, como Agustín Magaldi, Edmundo Rivero, Bruno Gelber, Jorge Salcedo, Azucena Maizani, Libertad Lamarque y, entre junio y septiembre de 1933, Carlos Gardel cantó y dejó su autógrafo en las paredes del camarín que ocupó a lo largo de sus presentaciones.
En 1982 cerró sus puertas. Luego de 22 años, fue recuperado, gracias a los vecinos y al Gobierno de la Ciudad y, en 2007, abrió definitivamente sus puertas
por allí pasaron figuras de la talla de Carlos Gardel y Edmundo Rivero. También fue escenario de eventos sociales de la época. Su esplendor le valió la denominación de “Petit Colón de Buenos Aires”.
Del auge pasó al abandono, y durante años fue desaprovechado. El capítulo de la reconstrucción incluyó adelantos tecnológicos y modernización, pero siempre preservando su valor patrimonial. Todo un símbolo que volvió a brillar. La imponente sala principal con 800 butacas, los palcos recuperados y la fosa de orquesta reconstruida conforman una impresionante atmósfera que conmueve a todos los espectadores.
Objetivo cumplido
El Teatro 25 de Mayo se ganó un lugar privilegiado en la intensa agenda cultural porteña: puestas teatrales, espectáculos musicales, talleres, exposiciones, proyecciones de documentales, cursos… el objetivo se cumplió con creces y este mítico edificio es un verdadero epicentro artístico que no descansa. Las actividades pueden estar destinadas a niños, jóvenes o adultos.
Abundan las propuestas gratuitas y la heterogeneidad en las propuestas. Recorrer la programación abierta a todo el público equivale a introducirse en un universo interminable de alternativas. Desde milongas -una de las salas se transforma en pista de baile al ritmo del 2 x 4- hasta completos cursos de letras o fotografía. Vale la pena explorar el menú de opciones que es tan amplio como interesante. Día a día, el Teatro 25 de Mayo es elegido por porteños y visitantes.