Este lema que se viene repitiendo desde hace 28 años marcó un antes y un después en el periodismo de nuestro país.

El 25 de enero de 1997 el periodismo en argentina dio un giro inesperado, ese día a JOSE LUIS CABEZAS le arrebataron la vida de la manera más ruin por el sólo hecho de hacer su trabajo.
El fotoperiodista de editorial Perfil estaba cubriendo la temporada en Pinamar, gracias a su buen trabajo como fotógrafo logra tomarle una foto al empresario Alfredo Yabran, quien hasta ese memento mantenía su cara en el anonimato.
Esta foto fue el comienzo del fin para José Luis, quien a los pocos días fue brutalmente asesinado por un grupo de sicarios, integrado por custodios, delincuentes y agentes de la Policía Bonaerense por encargo del poderoso empresario.
Su muerte fue “el peor crimen contra la libertad de expresión desde que volvió la democracia” dijo Gabriel Michi, amigo y compañero de coberturas de Cabezas.
Hoy se cumple otro año más de su asesinato y todos los periodistas y fotógrafos le decimos: “CABEZAS, PRESENTE”