viernes 22 noviembre 2024

Meteoróloga argentina recibió un premio Mundial

La Lic. María Eugenia Dillón, obtuvo el Premio a la Investigación para Jóvenes Científicos de la Organización Meteorológica Mundial, por los resultados de su investigación sobre nuevas técnicas de asimilación de datos.

María Eugenia Dillón, licenciada y becaria doctoral del CONICET (Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas), trabaja actualmente en el Servicio Meteorológico Nacional y con 30 años recibió el más prestigioso premio internacional, el WMO Research Award for Young Scientists (Premio a la Investigación para Jóvenes Científicos).
Este premio tan importante es otorgado por la Organización Meteorológica Mundial con el fin de incentivar a los científicos jóvenes, para que sigan llevando a cabo trabajos de investigación prominentes en todos los campos de la meteorología y la hidrología.
“Fue muy gratificante el reconocimiento, ya que son varios años de esfuerzo y de aprendizaje. Surgieron dificultades, pero las fuimos superando”, expreso la galardonada. “El trabajo que desarrollé se basó en implementar nuevas herramientas, un método fácil y de bajo costo que permitirá mediciones más exactas, a través de un nuevo software no tan complejo”, explicó.
Y recalcó que “me sorprendió porque sabía que se presentaban muchos trabajos buenos. Fue muy gratificante el reconocimiento porque son varios años de esfuerzo y aprendizaje. Surgieron dificultades pero las fuimos superando. No puedo dejar de agradecer al resto del equipo, que es interinstitucional e internacional, por las discusiones, tanto de los métodos como de los resultados, y el apoyo del SMN y el CIMA (Centro de Investigaciones del Mar y la Atmósfera) por los recursos computacionales”.
Su investigación se extendió a lo largo de 4 años y formaba parte de su doctorado, en él se desarrolla la asimilación de datos de observación, provenientes de las estaciones meteorológicas de superficie, de altura y de diferentes satélites, e ingresarlos a un programa computacional que resuelve las ecuaciones que manejan la física de la atmósfera y produce como resultado un “pronóstico numérico”. Este producto es materia prima fundamental para que los meteorólogos obtengan un pronóstico mucho más acertado sobre el clima de cada región y para diferentes aplicaciones, no necesitando a su vez de recursos informáticos más costosos.