Se aprobó la ley que exigían el Frente Para la Victoria , varios artistas y partidos políticos; para habilitar y regular la actividad de los muchos Centros Culturales que se encuentran cerrados en la Ciudad.

El pasado jueves los diputados del interbloque kirchnerista realizaron en el salón Arturo Jauretche de la Legislatura porteña, una conferencia de prensa en la que exigían al PRO que se tratara la ley que sustenta el funcionamiento de centros culturales, ya que en su opinión el PRO ”insiste con restricciones” a los espacios culturales.
Los diputados, que encabezaban la petición son Lorena Pokoik del Frente Para la Victoria y Pablo Ferreyra de Seamos Libres, con los representantes de los centros culturales de la Ciudad, MECA y Unidos y Organizados.
Al respecto la diputada Lorena Pokoik manifestó que: “El próximo jueves, última sesión del año, debería tratarse el proyecto de ley de Centros Culturales y el PRO insiste en sostener restricciones e impedimentos”, además dijo que “pareciera que quieren una ley que sólo sea un papel y no una herramienta para que los centros puedan ser habilitados”
Finalmente agregó: «No queremos una ley maquillada, queremos una ley que contribuya a la real democratización de la cultura y a poder habilitar los cientos de espacios culturales que existen en la Ciudad de Buenos Aires».
Como fuera solicitado, ayer se trató el proyecto por el que tanto abogó el FPV, y fue aprobado por unanimidad (56 votos a favor).
El mismo regula el funcionamiento de los Centros Culturales de la Ciudad de Buenos Aires, luego que la Agencia Gubernamental de Control, los clausurara por problemas de habilitación.
La iniciativa, elaborada en conjunto por los artistas y centros culturales y artísticos de toda la Ciudad, fue aprobada con 56 votos positivos en una sesión extraordinaria de la Legislatura, que tuvo como otro tema la jura de los representantes de los abogados ante el Consejo de la Magistratura.
En ese marco, también se sumó a último momento el expediente que contempla la regulación de los centros culturales existentes en la Ciudad, el que era reclamado por organizaciones como Unidos y Organizados y MECA.