viernes 20 septiembre 2024

Campaña de Vacunación Antirrábica 2018

Durante todos los fines de semana de Mayo, el Instituto de Zoonosis Luis Pasteur estará realizando la vacunación antirrábica de forma gratuita a todas las mascotas en varios puntos de la Ciudad.

El Instituto de Zoonosis Luis Pasteur, dependiente del Ministerio de Salud del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, todos los sábados y domingos del mes de Mayo entre las 10 y 17 horas, estará realizando de forma gratuita la vacunación antirrábica de los animales domésticos. La vacuna la pueden recibir todos los perros y gatos dentro del ámbito de la Ciudad, para ello se dispondrán varios puestos de vacunación en los distintos barrios porteños.
Hasta ahora ya se vacunaron a más de 54.000 mascotas en toda la Ciudad de Buenos Aires, con el fin de prevenir la Rabia, una Zoonosis de origen viral que se transmite mediante la saliva de un animal infectado.
Perros, gatos y murciélagos son algunos de los animales más comunes dentro de la Ciudad que pueden transmitir el virus a otros animales o incluso al ser humano. Es por eso que, desde 1981, se llevan a cabo varios tipos de medidas con el fin de controlar la Rabia en animales domésticos, como ser perros y gatos.


Es obligatorio que todo animal doméstico, a partir de los 3 meses de edad, comience a tener su vacunación anual antirrábica. Además, la tenencia responsable también conlleva a que todos los dueños controlen a sus mascotas durante el paseo con el collar y la correa, evitando contacto con animales desconocidos y, en caso de que sea mordido por otro animal, consultar automáticamente con un profesional.
Entre todos podemos hacer que la la Rabia una Zoonosis sea controlada.

Cualquier persona atacada por un animal con rabia, deberá acercarse de forma urgente al área de Profilaxis rábica del Hospital Durand en el Pabellón Romano, Diaz Velez 5044, único lugar dentro de la Ciudad de Buenos Aires que se encarga de atender este tipo de casos.
El tratamiento contra el virus puede abarcar desde una vacuna y suero, hasta la observación del animal agresor. Este último punto es muy importante, ya que en muchos casos permite reducir la cantidad de vacunas a aplicar, y mediante la observación del animal se puede ver que tan avanzado se encuentra el virus o si hay algún otro riesgo de por medio.