El próximo sábado durante una hora se apagarán las luces en el mundo, como parte de la campaña contra el cambio climático.

Este evento se realiza año a año en todo el mundo con el fin de concientizar a los habitantes acerca de la importancia del cambio climático para conseguir un mundo más sustentable, disminuyendo la contaminación lumínica y ahorrando energía.
La iniciativa comenzó en el año 2007 en Sidney, Australia, y en esa oportunidad se adhirieron 2 millones de personas, y año tras año continúan sumando adeptos para crear conciencia que la contaminación ambiental que influye en el cambio climático, nos perjudica a todos los habitantes del mundo.
Es la mayor iniciativa a nivel mundial de la Organización Mundial de Conservación, que en Argentina está coordinada por la Fundación Vida Silvestre, con el objetivo de concientizar a los ciudadanos de cada país, así como a los gobernantes y empresas privadas, acerca de la importancia del ahorro de energía.
Este sábado 30 de marzo de 20,30 a 21,30 horas, en Argentina se apagarán las luces de los monumentos más emblemáticos de la Ciudad, como el Obelisco, el Cabildo, la Plaza de los dos Congresos, el Monumento a los Españoles, la Floralis Genérica, el Puente de La Mujer, la Facultad de Ingeniería, el Palacio Lezama, la Peatonal Lavalle, el Planetario y la Torre Monumental.
Como sabemos, en la Ciudad de Buenos Aires, se realizan continuamente acciones para mejorar la sustentabilidad y la economía, con el objetivo de aprovechar los recursos, como al proceder al reemplazo del alumbrado público que ya más del 90% posee tecnología LED, gestionar los residuos sólidos y sumar cada día más espacios verdes.
El mismo día la Hora del Planeta junto a Vida Silvestre, ha organizado un evento familiar consistente en una carrera en el circuito de Costanera Sur, con el desafío de “llegar a tiempo a combatir el cambio climático”.