En la Ciudad de Buenos Aires se entregarán sorbetes únicamente a pedido del cliente durante seis meses más, para disminuir la contaminación ambiental.

El Ministerio de Ambiente y Espacio Público de la Ciudad de Buenos Aires, con su Agencia de Protección Ambiental, están impulsando una resolución para ir disminuyendo poco a poco el uso de sorbetes en la Ciudad.
Ahora ya no se entregan sorbetes si no los solicita el cliente, y dentro de seis meses ya no se entregarán más, con el fin de unirse a la iniciativa mundial de obtener ciudades sustentables.
En el año 2017 se comenzó con las bolsas plásticas que ya no se entregan en los comercios, pues son el principal problema para los sistemas de drenaje, y de ese modo se evitó que 500 millones de bolsas llegaran a los desagües pluviales.
Ahora acompañando una iniciativa mundial, se irá disminuyendo de a poco el deshecho de sorbetes, que llegan a tardar hasta 400 años en descomponerse, y se estima que en la Ciudad de Buenos Aires se consumen casi 2 millones de ellos en shoppings y patios de comidas, lo que equivale a 1,7 toneladas.
Estos al descomponerse generan partículas plásticas que ingieren los peces y afectan su supervivencia, y en el Río de la Plata en algunas especies se han encontrado peces con ellos en su tubo digestivo.
Esta medida será principalmente para hoteles de 4 o 5 estrellas, shoppings, centros comerciales, locales con más de trescientas personas en cada evento, locales bailables, y comercios que venden productos alimenticios y golosinas.
En nuestro país ya se han adherido a la consigna algunas ciudades como Pinamar, Villa Gesell, Mar del Plata, Mar Chiquita, Mendoza y Ushuaia; y a nivel mundial los que han adherido a la medida son la Unión Europea, Río de Janeiro, Costa Rica, Escocia, Galápagos, Vancouver.
También en Estados Unidos se ha tomado la misma medida en las ciudades de California, en Alameda, San Luis Obispo, Davis, Carmel, Malibú, Berkeley, Oakland, Richmond; en Florida, en Fort Myers, y Miami; además de Oregón, Hawaii y Nueva York.