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El martes 20 de abril a las 8 de la mañana se abrió la inscripción para mayores de 65 años en la Ciudad para la vacunación del Covid-19.

El pasado martes 20 de abril, a las 8 de la mañana, se abrió la inscripción para que todos los vecinos de la Ciudad de Buenos Aires mayores de 65 años se puedan anotar para recibir la vacuna contra el Covid-19.

Sabiendo esto y teniendo en cuenta que tengo 66 años de edad, a las 8.10 de la mañana ingresé a la página y me anoté. Al instante me llegó por mail y por WhatsApp la información de que ya estaba inscripta y que pronto se comunicarían para que pudiera anotar el día y hora de la vacunación.

A las 11.30 de la mañana me enviaron nuevamente por el mismo sistema la página para elegir el lugar, el día y la hora que deseaba vacunarme.

De todos los lugares que aún quedaban con turnos elegí el que mejor me convenia, Bernardo de Irigoyen 330 el día miércoles 21 a las 11.15 hs, ósea al día siguiente.

El día elegido llegué al lugar, me tomaron la fiebre, me buscaron en una planilla y me permitieron el ingreso. Pasé por una ventanilla donde me solicitaron el DNI y nuevamente constataron mi identificación, luego otro Sr. de Gendarmería constató en la planilla y me permitió el ingreso al salón de vacunación, dividido en dos sectores, uno para esperar para vacunarse, habría 10 personas sentada con la distancia social y otro sector separado en el mismo salón donde se espera luego de ser vacunado.

Había en el lugar dos box de vacunación al cual se ingresaban de a uno teniendo en cuenta la hora de inscripción.

En el box una enfermera muy amable me colocó la vacuna Aztrazeneca. No sentí nada, pero antes de inocularme hizo algunas preguntas protocolares referentes a si no era alérgica, si tomaba algo y si no estaba anticoagulada. Luego me informó que podía presentar febrícula, dolor de cuerpo y algunas otras sensaciones que la vacuna podría producirme.

Otro gendarme me pidió que esperara 15 minutos sentada y como yo estaba con mi hijo, envió a este, a hacer el trámite para anotarme para la segunda dosis.

Realmente todo muy organizado, todos muy amables y educados y con una atención y organización fuera de serie.

Por la tarde me enviaron un WhatsApp para pregúntame como había estado todo y me pidieron que llenara una planilla con datos.

Durante la noche tuve unas líneas de fiebre y dolor de cabeza, me comunique con el 107 y muy amablemente me informaron los pasos a seguir para bajar la fiebre, no antes de hacerme algunas preguntas y que síntomas tenía, les cuento que eran las 4 de la mañana y así y todo me atendieron al primer llamado.

Realmente desde la inscripción hasta mi llamado al 107 tengo que decir que ha sido excepcional y lo más organizado.

¡Muchas gracias a todos por la atención recibida!

Margarita Haverl

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